lunes, 26 de mayo de 2008

170. Una boda, un presidente, un fénix.

El fin de semana fui a una boda.
Fue en un pequeña aldea cristiana ("dea", en árabe significa pueblo, con artículo es "al-dea") al norte del Líbano, en donde todo el mundo de alguna manera está emparentado (como en Bee Movie, me dijo el amigo que me invitó).
A la entrada de la población había un grupo de chicas.
-Ellas son tus primas también?
-Siiii... porqué no. Lejanas. -Me dijo en tono simpático-
-Me gustan tus primas Joey.
Mi amigo se llama Joseph, lo cual en Líbano es más común que la variante árabe Yussuf. Le digo "Joey" o solo "dude" porque es australiano. Nos dirigimos al pueblo natal de su madre.
Solía ser una población pobre, después todo el mundo emigró y ahora con el dinero que viene de la diáspora se construyen las casas.
Me acordé de México, en especial del Norte. Los poblados se vacían de hombres quienes se van a Estados Unidos para trabajar. Después, con el dinero que mandan, construyen las casas, con televisión satelital y todo.
La boda con sus peculiaridades locales es como cualquier boda de pueblo, todo el mundo en la calle baila, come, bebe. La noche anterior se celebra la leilie, que es la "noche antes de la noche" y al otro día, la recepción, después de la iglesia.
Mientras la prima cercana celebraba su casamiento y yo socializaba con aquellas primas lejanas de Joey, quienes hablan castellano por cierto, pues nacieron y vivieron en Colombia, mientras eso ocurría y un tipo festejaba disparando al cielo con una Kalashnikov, -pues parece que en este pequeño país tener una de esas cosas es asunto de lo más normal-, los diputados libaneses se dignaban elegir, después de un sinúmero de intentos fallidos y seis meses flotando en el limbo, un presidente de la República.
El único jefe de Estado tradicionalmente cristiano en todo el Medio Oriente y el mundo árabe.
Y mientras todos celebrábamos la boda, y brindábamos por el nuevo presidente (no soy libanés, pero viviendo aquí, tranquiliza el saber que alguien surgido del concenso ocupa el palacio de Baabda), la sonda espacial Phoenix se posaba sobre Marte.
Lo del amartizaje no lo celebramos, pero de cualquier forma parece que el fin de semana tuvo su parte emocionante, incluso en otro planeta.

1 comentario:

  1. mi hermano parace que tuviste un fin muy movido , mas bien ocupado por lo menos la pasaste bien saliste de lo comun hasta conociste primas!!! q de seguro estaban guapas ya que es bien sabido que tienes buen gusto aunque a veces tienes malos ratos jajaja pero bueno q bien a de haber sido toda una experiencia la boda por lo que cuentas y por lo menos ya esta tranquilo Libano con eso que ya hay Presidente ya es algo no !!! un abrazo y q t sea leve la semana ciao

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